Invitación a la presentación del libro.
Culpas, fantasías y otras
perversiones recurrentes (2014) es un libro de fotografías conmemorativo por el
décimo aniversario, en el ámbito, de un
gran fotógrafo (y amigo), Eduardo Gómez. He tenido la oportunidad de trabajar
con él en varias ocasiones y en todas ha sido un placer, pues los resultados siempre
son originales y maravillosos para ambos. La presentación se llevó a cabo el
pasado 9 de agosto, en la colonia Roma (D.F.).
Tiempo antes a la publicación de
este libro, que llevó meses de trabajo y la colaboración de más de 40 modelos y
30 sesiones fotográficas, el propio autor afirmó:
Este proyecto será publicado en la forma de un libro conmemorativo de
mi décimo aniversario dedicándome a la fotografía y trata sobre uno de los
temas que más me ha apasionado: El erotismo.
La obra estará formada por una selección de imágenes llenas de
simbolismos, fetiches, fantasías y perversiones que muchos tenemos y que muchas
veces ocultamos.
Dichas imágenes buscan por un lado ser artísticas, estéticas, elegantes
e impecablemente ejecutadas, pero al mismo tiempo surrealistas, irreverentes,
transgresoras y hasta cierto punto perturbadoras.
Fotografía por Alter Imago.
Una de las grandes particularidades de este
libro es que fui invitada a participar en él como modelo y como escritora, pues
tuve el honor de redactar el prólogo y aparecer en tres de las fotografías.
Este libro muestra el arte de un
fotógrafo que ha evolucionado e innovado a lo largo de una década y que sigue
en un camino constante de aprendizaje, experimentación y trabajo ininterrumpido del que hace partícipe a sus alumnos a través de sus diversos talleres.
Es siempre un placer conocer,
colaborar y, sobre todo, estar presente en los logros de las personas que se
estiman, más aún cuando la admiración es mutua y se logra crear en conjunto
para un mismo fin.
Hay múltiples ejemplos de la
fotografía como arte y técnica, y ahora se presenta en un libro que aúna a lo
anterior una temática difícil de tratar (y más de observar) en nuestra sociedad:
lo erótico de las perversiones.
Fotografía por Alter Imago.
Fotografía por Alter Imago.
Quedan cordialmente invitados,
entonces, a formar parte de esta realidad deseada pero oculta gracias al miedo
(o incluso terror) que se ha instaurado en reconocer el placer y la
satisfacción que produce la sexualidad.
Fotografía por Alter Imago.
El libro, por el momento,
únicamente está a la venta directamente con Alter Imago Fotografía, en su
página de Facebook.
No teman arriesgarse a descubrir la satisfacción de la que
han sido privados.
Prólogo
En este proyecto, Eduardo Gómez
(Alter Imago Fotografía) nos presenta, dentro de un gran repertorio de
atractivos rostros y cuerpos, al erotismo, ese comportamiento inherente a la
sexualidad de todo ser humano. Esta admirable fotografía erótica deberá estimular
los sentidos y la imaginación de quien la observe con una sola finalidad:
incitar el deseo sexual, ese territorio muchas veces vedado de la
concupiscencia y el placer.
La etimología de fotografía (del griego phōs, 'luz' y grafḗ, 'conjunto de
líneas, escritura'), crea el significado de
"escribir o grabar con la luz", de ahí que la lectura más
simple de estas fotografías, que muestran lo oculto y conservan cierto misterio
intrigante, descubre gustos y placeres que han sido vedados por nuestra cultura
occidental y sus convenciones sociales, por una moral engañosa construida por
la sociedad burguesa sólo para mantener las “buenas apariencias”. Inclusive, no
es necesario que las fotografías digan o muestren más, pues son un atisbo a
paraísos o infiernos personales a los que no todos nos atrevemos a entrar en
nuestra realidad. Culpas, fantasías y otras perversiones recurrentes nos
muestran poderosas y diversas imágenes cargadas de sensualidad y símbolos
divinos transgredidos en pos del placer. A través de un compendio de texturas,
ángulos, matices y luces se crean los escenarios perfectos para la redención al
deleite de los sentidos.
Esta fotografía erótica o
pornográfica (diferencia perdida siempre en el sutil filo de la navaja) y por
lo mismo censurada por los conservadores, inició la creación del testimonio
erótico incitado por la figura humana desde algunos daguerrotipos de finales
del siglo XIX hasta la fotografía erótica moderna, de la que tenemos algunos de
los mejores ejemplares en este libro.
Más allá de cumplir su cometido
estético y corporal, Alter Imago le otorga un lugar privilegiado y adecuado al
cuerpo desnudo que va más allá de los límites del placer en el retrato, pues lo
coloca en el lugar preciso: el centro de las fantasías más recónditas de
cualquier observador.
Lola Ancira
No hay comentarios:
Publicar un comentario