sábado, 30 de noviembre de 2013

Pāyğāme

Este es el segundo de los cuentos (inéditos hasta ahora) que conforman mi libro Tusitala de óbitos, y lo escribí en el 2011, a partir de una conversación singular y envuelta en  fantasía que tuve con dos buenos amigos, que resultó de utilidad creativa, y que son precisamente a quienes dedico el cuento. Espero intrigarlos a querer leer los otros relatos y que disfruten de estas primeras letras impresas, que finalmente se asoman al mundo. Aún está por confirmarse en qué librerías estará a la venta, pero por lo pronto, los interesados se pueden poner en contacto con Gabriela Flores a través del correo electrónico editorial@pictographia.com. Sin más preámbulos, el cuento:


Hombres musulmanes vistiendo las primeras pijamas (Bombay, 1867).

Pāyğāme*

...humildemente busca la muerte como quien busca el sueño.”

J. L. Borges



A Adriana y Oliver.



Existe un mal que afecta a la especie humana desde hace pocos siglos. Es originario de Persia y resultó más evidente y común en occidente a principios de 1900, cuando tuvo un foco de contagio del primer brote actual en Inglaterra.


El mal se fue generalizando hasta perjudicar casi en su totalidad a la población mundial. Son escasas las personas que se libraron de esta intangible afección, ahora tan usual, pero nunca han logrado sobrevivir más de tres o cuatro días, tras lo cual perecen por locura. Se ha descubierto un patrón clínico común tras realizar investigaciones en los pacientes voluntarios: el somnífero trabaja al contacto con la piel y después de transcurrido el tiempo apropiado, comienza a actuar sobre el cerebro del individuo

En general es una intoxicación muy ligera, casi imperceptible, por la cual las personas van cayendo en diferentes estados de inconsciencia que, conforme pasan las horas, se vuelven cada vez más profundos.


Uno de los primeros síntomas en las personas afectadas por este mal, son las alucinaciones que se padecen en el trayecto del proceso del envenenamiento, pudiendo darse estas en algún momento en específico, o en peores casos, durante toda la inoculación del veneno a su organismo, que oscila entre diez minutos y nueve horas o más (en los casos graves).


Estas alucinaciones, oportunamente, han recibido el nombre de 'sueños'. La palabra sueño tiene su origen en la raíz latina somnus, conservada ésta en el cultismo somnífero. Los sueños se generan por la acción del tósigo, que deja en un estado generalizado de reposo al organismo, lo que lo conlleva inevitablemente a una reducción de sus acciones fisiológicas.


Estos sueños van creando telarañas de imágenes, aunando realidad con fantasía, que, para formar parte del consciente, sólo puede regresar en forma de una vorágine de imágenes procedentes del recuerdo y que de no ser debidamente documentadas, desaparecerán en un lapso máximo de dos horas.


Recientes estudios, en pacientes afectados durante toda su vida, han revelado que los sueños que se generan gracias al somnífero que es suministrado en este raro padecimiento, son el resultado de una recopilación de información importante, así como de recuerdos (positivos y negativos), traumas, deseos y anhelos, expectativas del futuro, miedos y muchas otras sensaciones y vivencias que son resultados de las impresiones emocionales formadas por el trabajo cerebral, las cuales son creadas para afrontar exitosamente la vida diaria del ser humano.


El principal efecto de esta epidemia, sobre la mente de los seres humanos, es una especie de evasión de la realidad para el inconsciente, lo que deja abierto un mundo alterno repleto de las posibilidades más dislates y que, en la vigilia fatalista, es muy usual que acosen a su creador.


En general, este padecimiento se ha visto asociado con diferentes enfermedades del sueño que pueden ser mortales o causantes de diversos trastornos mentales. Dichas enfermedades pueden ser la apnea, el insomnio familiar fatal, las alucinaciones portentosas o el síndrome de la cabeza explosiva.


Una de las principales teorías es que este mal reside en las diferentes prendas que utilizan las personas para vestir en casa durante las noches. Lo que se tiene registrado es que el mal va empeorando en las personas conforme sus prendas para dormir (usualmente llamadas pijamas) reciben un trato brusco o de desprecio. Las personas que le dan los cuidados necesarios a sus pijamas, se ven menos afectadas por los padecimientos de las que no lo hacen.


Así mismo, otro factor para el empeoramiento se da en pacientes adultos y en personas no adeptas al cuidado personal, pues esto se deriva en la despreocupación por sus pijamas. Estas prendas para dormir humanos con efectos alienantes, desmedradas por ciclos de lavados fuertes para pijamas hechas con telas delicadas, por el uso de jabón de baja calidad, falta de suavizante para prendas, carencia de algún botón(es) o cierre(es), resortes flojos o por no zurcir algún desgarre pequeño o considerable, son las principales causas de intoxicaciones severas que, generalmente, culminan con la muerte del portador o deja a los sobrevivientes en un estado de somnolencia eterna.


El muro de granito que divide la realidad del sueño se vuelve tan endeble que finalmente termina por desmoronarse en fragmentos de cordura que, después de perderse en la inmensidad del universo especulativo, expiran en la misma órbita de los pensamientos depurados.


Los sueños de algunos son la realidad de otros y la confusión puede ser tan grande que estas letras pueden ser parte del inconsciente que está siendo liberado durante un sueño.


Como Borges lo afirmó, Schopenhauer y Berkeley no estaban equivocados al afirmar que la vida es el resultado del inextinguible trabajo creativo de la mente. 
 

                                                                                                    Lola Ancira, México, 2011.


* Este relato forma parte del libro Tusitala de óbitos, de la Colección de narrativa joven del Centro de Occidente 'Poéticas contemporáneas' de Pictographia Editorial. Esta producción editorial se realiza con apoyo del beneficio derivado del Artículo transitorio cuadragésimo segundo del Presupuesto de Egresos de la Federación 2012.

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