Mire al pajarito (editorial Sexto Piso,
2010) de Kurt Vonnegut (escritor estadounidense, 1922-2007) es una publicación
póstuma de 14 cuentos inéditos y una carta, escritos en la década de los 50,
cuyas temáticas oscilan entre fuerte crítica social, lo fantástico, la sátira,
cierta dosis de ciencia ficción, misteriosas y fatales conspiraciones y
existencias ínfimas pero extremadamente valiosas. Cuenta, también, con algunas
excéntricas ilustraciones hechas por el mismo autor.
Vonnegut,
destaca escritor del siglo XX, escribió 15 novelas, y sus 3 libros de relatos
fueron publicados años después de su muerte. Desayuno de campeones y Matadero
cinco o La cruzada de los inocentes son dos de sus obras más conocidas,
importantes y representativas de su narrativa.
En “Salón
de espejos”, a través de una estructura en espiral, que imita la infinita
sucesión de imágenes de una habitación circular cubierta por espejos (la
perfecta morada del hipnotizador farsante convertido en protagonista), se
convierte en el escenario final de un relato donde los personajes no son en
absoluto lo que aparentan, y donde la acción cambia drásticamente con un simple
diálogo.
En “Las
personitas simpáticas”, al igual que sucede en varios de sus cuentos, la tensión narrativa y el desenlace están en los últimos párrafos, y el efecto siempre es devastador. En este relato, el protagonista se ve inmerso en lo que aparenta ser un crimen pasional del que, a pesar de ser inocente, decide culparse: sabe que los acontecimientos son inverosímiles y que, en cierta medida, quería que todo terminara de esa manera.
“Hola,
Red” más allá de mostrar el enfrentamiento simbólico de dos hombres por completo
opuestos, muestra la rivalidad de uno de ellos con la sociedad del pequeño
poblado que abandonó algunos años atrás, pero que aún conserva su recuerdo en
un ser mucho más pequeño, que es precisamente el que el que le da el mensaje de
desprecio más directo: entregando su vínculo más notorio en una bolsa de
estraza.
“Las
hormigas petrificadas” describe el asombroso descubrimiento de dos hermanos
(“los mirmecólogos más destacados de Rusia”), en una de las excavaciones más
profundas que se han realizado recientemente. Pero el hallazgo pasa a segundo
término, pues viven bajo el régimen totalitario y cruel de Stalin. Bajo la
total represión a la que se ven sometidos, surge el repudio rotundo por parte
de uno de ellos hacia el gobierno de Stalin y la actitud conciliadora del
otro, pues es consciente de que su vida
depende de ello. Sobre la maravilla encontrada en las profundidades, de la cual
deben negar, por supuesto, toda información real y científica, destaca que “…contemplaron
con incredulidad las pruebas que demostraban que las hormigas habían sido
individuos en el pasado; individuos con
una cultura que rivalizaba con la de los nuevos y arrogantes señores de la
Tierra, los hombres.” Precisamente lo que estaba sucediendo en su contexto
social, millones de años después: la historia se repite una y otra vez.
“Mire
al pajarito”, cuento que da el título al libro y uno de los más breves, es sin
duda una historia increíble en la que las perturbaciones mentales cobran el
lugar protagonista. Conciso, poderoso y singular, Vonnegut demuestra aquí la
fuerza y originalidad de su ingenio.
Pueden
leer la increíble carta al profesor Walter J. Miller, en1951 (antes de publicar
su primer novela), y el primer cuento en este enlace de la editorial. Por cierto, la carta termina con esta frase contundente: "...si no soy un escritor, entonces no soy nada".
Poco
antes de morir, Vonnegut estableció 8 (increíbles) reglas para escribir relatos
de ficción:
1.
Usa el tiempo de un completo extraño de tal forma que él o ella no sienta que lo malgastó.
2.
Dale al lector al menos un personaje con el que se pueda identificar.
3.
Todos los personajes deben querer algo, aunque sea un vaso de agua.
4.
Cada frase debe hacer una de estas dos cosas: revelar algo del personaje o
hacer avanzar la acción.
5.
Empieza tan cerca del final como sea posible.
6.
Se sádico. No importa qué tan inocentes sean tus protagonistas, haz que les sucedan cosas horribles, para que el lector pueda comprobar de qué están hechos.
7.
Escribe para complacer únicamente a una persona. Si abres la ventana para
hacerle el amor al mundo, tu cuento cogerá una neumonía.
8. Dale a tus lectores toda la
información posible lo más rápido que puedas. Al diablo con el suspenso. Los lectores
deben saber lo que está pasando, dónde y porqué, de tal modo que, si las cucarachas se comen las últimas páginas, ellos mismos sean capaces de terminar la historia.
El libro lo pueden encontrar en librerías
como Gandhi o El Péndulo.
Para finalizar, transcribo algunas de las
mejores frases de Vonnegut en estos cuentos.
Confido
“—Es una línea
directa a lo peor que llevamos dentro, Henry —dijo Hellen, que rompió a llorar—.
¡Nadie debería tenerlo, Henry! ¿Nadie! Esa voz interna ya es bastante fuerte
sin él.” p. 28
Fubar
“Es
posible que su infelicidad le guste tanto que no quiere hacer nada para
cambiarla.” p. 43
Gritarlo a los cuatro vientos
“No
me pareció que fuera un libro tan despiadado, en el sentido de los libros
despiadados de nuestros días. Simplemente era el libro más despiadado jamás
escrito por una mujer, e imagino que por eso fue tan popular.” p. 49
Salón de espejos
“Era
su futuro lo que estaba enfermo.” p. 142
“—Mire cualquier espejo y verá el largo y tortuoso camino que mi voz debe seguir para llegar a ellos (…)” p. 144
Las personitas simpáticas
“…no
era un misterio ominoso sino lo suficientemente desconcertante como para que se
creyera envuelto en una pequeña aventura.” p. 152
Hola, Red
“…los
músculos voluminosos de sus antebrazos se tensaron bajo sus tatuajes, bajo los
símbolos entretejidos de la sed de sangre y el amor: puñales y corazones.” p.
166
Gotitas de agua
“Aunque
los solterones son gente solitaria, estoy convencido de que los casados son
gente solitaria con cargas familiares.” p. 183
“Guardar
grandes secretos, particularmente cuando son secretos de uno mismo, es una
perspectiva difícil hasta para las personas muy brillantes, y es mucho más duro
para las mentes pequeñas (…)” p. 195
“Se
trate de lo que se trate, siempre es demasiado maravilloso para no gritarlo a
los cuatro vientos en busca de admiración.” Ibídem
Las hormigas petrificadas
“…las
(hormigas) amantes de las imágenes evolucionaron de forma
distinta que las amantes de los libros." p. 215
Mire al pajarito
“…nos
miraba con la belleza infantil y desgarradora de la esquizofrenia.” p. 237
“—Un paranoico, amigo mío, es una persona que
se ha vuelto loca de la forma más inteligente y mejor informada, que ve el
mundo tal como es.” p. 238
“…personas que estaban convencidas de que
algún desconocido pretendía asesinarlos…” p. 239
El rey y la reina del
universo
“…la víctima había sido un hombre sucio y sin
hogar, una de esas personas que aparentemente nacen para ser asesinadas por
menos de un dólar.” p. 246
Son extraordinarias sus cartas y crónicas de la guerra !!!
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